Importancia de la seguridad en el hogar
octubre 19, 2017Cambiar el bombín de la cerradura
abril 7, 2019Llegar a casa e intentar abrir la puerta sin éxito, frustra a cualquiera. Pasa por diversos motivos que van desde una llave desgastada hasta un cilindro dañado. Aunque la desesperación nos envuelva, no debemos entregarnos al problema; por el contrario, busquemos una solución como contratar a un cerrajero en Zaragoza.
Más de una persona opta por derribar la puerta, sin medir que la acción resultará más costosa que pagarle a un profesional por un trabajo rápido y efectivo.
Rescatando lo bueno del mal momento, puede pedirle al cerrajero algunos trucos para solventar y si llegase a ocurrir un nuevo percance, capaz usted mismo lo resuelve.
¿Qué hacer en caso de emergencia?
Aquí te adelantamos algunas técnicas que aplican los mejores cerrajeros de Zaragoza para llevar a cabo sus trabajos.
- Sacar la llave cuando se atasca: este es uno de los problemas más comunes que reportan a las cerrajerías. Lo principal es trabajar con sumo cuidado para no partir la llave y que queden restos dentro del cilindro.
Intenta tirar sin hacer palanca; tus movimientos deben ser controlados, ayúdate con unas pinzas o tenazas para extraerla girando lentamente de un lado a otro.
El lubricante es un buen aliado para retirar la llave con mayor facilidad. Pero si el asunto se complica, recuerda que siempre puedes llamar a tu cerrajero de confianza.
- Por más que lo intentes, la llave no entra: puede pasar cuando es nueva y aún en sus “dientes” quedan asperezas, debido a que no las limaron adecuadamente. En las cerrajerías de Zaragoza pueden revisarlas y si es necesario lijar hasta quitar los excesos.
Cuando no se trata de asperezas, los cerrajeros verifican que en el cilindro no haya algo que impida su paso, por ejemplo suciedad. Con sus herramientas hacen un excelente trabajo de limpieza; pero si te aventuras a revisar, usa una aguja o alfiler para remover lo que esté dentro del agujero. Se cauteloso, para que el cuerpo indeseado no se ruede más al fondo.
Si después de chequear se comprueba que no hay nada dentro, quizás se trate de un congelamiento. Eso quiere decir que por las bajas temperaturas la cerradura se hiela; calienta un poco la llave, introdúcela y así se descongelará.
En última instancia, si no funciona, lubrica el cilindro con polvo de grafito; lo venden en spray se encuentra en cerrajerías o ferreterías.
- Pestillo atascado: sucede cuando el mal uso de la puerta ocasiona su desplazamiento y el roce del pestillo con alguna parte de la pestillera que se empotra en el marco. Otro motivo es el desgaste de las bisagras.
Ante tales circunstancias, los profesionales de la cerrajería reajustan las bisagras de la puerta hasta alinearla con el marco, de manera que cierre sin problemas. Si consideras que es una tarea algo complicada, déjala en manos de cerrajeros en Zaragoza.
- La llave gira con dificultad: cuando la puerta se abre dando vuelta a la llave y al pomo al mismo tiempo, intenta hacerlo en distintos tiempos hasta que halles el punto en que logres la apertura. Como en casos anteriores, tiene que ver con la vida útil de la cerradura, pues luego de un buen tiempo tiende a aflojarse.
El método de lubricación con polvo de grafito también es recomendado en estos casos, así como contratar los servicios de una cerrajería.
- Aunque gira, la llave no abre: pareciera que el agujero es demasiado ancho, en ese caso estaría dañado el mecanismo. Conviene dejar esta reparación o sustitución a un cerrajero.
¿Alguna vez has tenido estos problemas? Entonces ya sabes qué hacer y a quiénes acudir para hallar solución